Noticias de Taiwán
Mao Tse-tung y su Partido
16/09/1971
I. MAO TSE-TUNG Y SUS COMPROMISOS
La historia del período de la guerra sino-japonesa no es suficientemente conocida en el exterior. Ni es muy notable la colaboración que reciben nuestros historiadores en ese sentido, de fuentes extranjeras.
El 21 de agosto nos ha traido una colaboración de un sector inesperado. Una radio de la Unión Soviética, transmitiendo en chino, aclara la participación de los maoístas en la lucha anti-japonesa del pueblo chino.
La radio soviética acusa a los maoístas de falsificar la historia al atribuir a Mao y a su "ejército de liberación" las victorias obtenidas sobre los japoneses. "En realidad -afirmó la radio rusa- Mao y sus secuaces hicieron todo lo posible para impedir que el Partido comunista y sus fuerzas armadas participaran en la ofensiva contra los japoneses. Lo que procuraban era destruir el frente unido con el Kuomintang, haciendo enfrentar a las fuerzas nacionalistas con los invasores japoneses, a fin de debilitar al Kuomintang y preparar así su toma del poder".
A decir verdad, esto no es nuevo para nosotros ni para los rusos. Estos lo usan ahora, debido a su conflicto con Mao y no por un amor excesivo a la verdad histórica. Pero de hecho es así. En el otoño de 1937, antes de la partida de Chu Teh al frente del Octavo Ejército, Mao se dirigió a las tropas: "La guerra sino-japonesa nos ofrece a los comunistas una excelente oportunidad de expansión. Nuestra política es dedicar el 70 por ciento de nuestros esfuerzos a ese fin, el 20 por ciento a enfrentarnos con el Gobierno, y el 10 por ciento restante a luchar contra los japoneses." Esa exposición de la estrategia maoísta fue hecha menos de un año después de haber entrado en formal acuerdo con el Gobierno de Chiang Kai-shek - a pedido de los mismos maoístas en telegrama del 5 de mayo de 1936. El acuerdo obligaba a los comunistas a aceptar los "Tres Principios" del Dr. Sun Yat-sen, a integrar sus ejércitos con el Ejercito Nacional, y a reconocer y obedecer el Gobierno del Generalísimo Chiang Kai-shek. Buen ejemplo de como cumple Mao las obligaciones contraídas.
II. PARTIDO MAOISTA DEBILITADO
"A pesar de la continuidad de su historia, su dogma y aún de buena parte de su personal, el Partido comunista chino de julio de 1971 - a los 50 años de su fundación - es un nuevo infante, con todas las debilidades inherentes a ese estado."
Así lo afirma el semanario londinense "The Economist", comentando sobre el 50 aniversario del partido.
Extraemos algunos puntos de importancia señalados por ese semanario:
Las líneas de comando, que en otro tiempo llegaban sin solución de continuidad a todas las provincias y municipios, y hasta las fábricas y los mismos arrozales, sufren hoy graves interferencias. 4 de las 29 provincias carecen todavía de la nueva organización partidaria, y las que la tienen apenas logran mantener las más básicas comunicaciones con Peiping.
Bajo el nivel provincial, las líneas de comando se encuentran en completa desorganización.
Una fundamental diferencia entre el partido de hoy y el "modelo" de Mao Tse-tung, consiste en que, contra los preceptos del maestro, el ejército domina hoy al Partido.
Ese dominio se manifiesta no solo en los números - 40 por ciento de los miembros del Comité Central electo en abril de 1969 son militares - sino también en la importancia de los puestos que ocupan - de 25 líderes provinciales del partido 15 son militares, 9 de ellos Comandantes provinciales o regionales del ejército.
Esto puede ser también un resultado psicológico. Aunque se han hecho grandes esfuerzos para vivificar el partido según las líneas antiguas, los que han sido testigos de las humillaciones y castigos impuestos a los líderes antiguos durante la revolución cultural, no es probable que se esfuercen en ascender en la jerarquía del partido basandose en sus méritos. Solo los que se sienten apoyados por el poderío militar se atreverán a escalar esas posiciones. Naturalmente, los Líderes militares serán más numerosos que los civiles.
Es más fácil estimar la militarización del partido comunista chino que calcular sus efectos. "The Economist" cree que con la inabilitación o desaparición de Mao Tse-tung y Chou En-lai, el impacto de los militares será más evidente.
Indisputablemente, la nueva generación de jefes del comunismo chino será en gran parte constituida por militares. Entre los miembros activos del politburo, el ejército constituye el elemento más fuerte. El Jefe del Estado Mayor, Huang Yung-sheng ocupa la cuarta posición, detrás de Chou En-lai. Huang recibe a los dignitarios extranjeros que visitan Peiping y ha viajado al exterior en misiones no-militares. Lo mismo se puede notar de otros jefes militares.
"The Economist" se pregunta si el partido comunista chino podrá sobrevivir como el principal instrumento del poder en el continente. Y cree que esto dependerá de la durabilidad de Mao.